Enseñar a ir al baño

Signos de que su hijo(a) está preparado(a) para aprender a ir al baño

Debe empezar a enseñar a su hijo(a) a ir al baño cuando muestre signos de que está preparado(a). La capacidad de controlar los músculos del intestino y de la vejiga depende del crecimiento y el desarrollo. El desarrollo de cada niño ocurre a un ritmo diferente. La mayoría de los niños pueden lograr el control del intestino y de la vejiga aproximadamente entre los 24 y los 30 meses. La edad promedio para aprender a ir al baño es a los 27 meses.

Estos pueden ser indicadores de que su hijo(a) está preparado(a):

• Camina lo suficientemente bien como para ir a la bacinica.
• Avisa cuando necesita ir al baño.
• Controla los músculos que se usan para ir al baño.
• Pide que le cambien el pañal o avisa cuando está por orinar o defecar.
• Se muestra molesto(a) cuando tiene el pañal mojado o sucio.
• Le gusta copiar lo que hacen los padres o niños más grandes.
• Lo(a) sigue cuando va al baño y observa cómo se usa el inodoro.
• Quiere hacer cosas (como ir al baño) para que los padres estén contentos o para que lo(a) elogien.
• No moja el pañal durante al menos dos horas en el día o lo tiene seco después de dormir la siesta o de dormir durante la noche.

Cómo empezar a enseñarle a ir al baño

• Si tiene hermanos más grandes, pídales que dejen que su hijo(a) pequeño(a) los vea cuando usted los elogia por ir al baño.
• Lo mejor es usar una bacinica en el suelo, en vez de poner al niño en el inodoro cuando está aprendiendo. La bacinica es más segura para la mayoría de los niños, porque los pies les llegan al suelo y no tienen miedo de caerse. Si decide usar un asiento sobre el inodoro, use un apoyo para los pies.
• Deje que su hijo(a) juegue con la bacinica o el inodoro: siéntelo(a) cuando tenga ropa puesta y, más adelante, sin los pañales. Esto le ayudará a acostumbrarse.
• No debe estar sentado(a) en la bacinica ni en el inodoro durante más de cinco minutos. A veces, los niños defecan justo después de que se les vuelve a poner el pañal porque están acostumbrados y se siente normal. No se enoje ni castigue a su hijo(a). Puede intentar quitarle el pañal y poner la materia fecal en la bacinica mientras su hijo(a) mira. Eso puede ayudar a que su hijo(a) entienda que usted quiere que la materia fecal vaya a la bacinica.
• Si su hijo(a) suele defecar siempre en el mismo horario (por ejemplo, después de comer), puede llevarlo(a) a la bacinica en ese momento. Si su hijo(a) actúa de cierta manera cuando quiere defecar (por ejemplo, se agacha, se queda en silencio, se va a un rincón), puede intentar llevarlo(a) a la bacinica cuando muestre que es el momento.
• Si su hijo(a) quiere sentarse en la bacinica, puede quedarse junto a él (ella) y hablar o leer un libro.
• Es una buena idea usar palabras para lo que su hijo(a) está haciendo (“bacinica”, “pis” o “popó”). De esa manera, su hijo(a) aprende las palabras para avisarle. Recuerde que otras personas oirán esas palabras. Trate de no usar palabras que ofendan, confundan o avergüencen a otras personas o a su hijo(a).
• Evite usar palabras como “sucio”, “asqueroso” u “oloroso” para describir la materia fecal o la orina. Use un tono simple y objetivo.
• Si su hijo(a) se levanta de la bacinica antes de orinar o de defecar, mantenga la calma y no lo(a) regañe. Intente de nuevo más tarde. Si su hijo(a) logra orinar o defecar en la bacinica, elógielo(a) mucho (por ejemplo, sonría, aplauda, dele un abrazo).
• Los niños aprenden copiando a los adultos y a otros niños. Puede ser útil que su hijo(a) se siente en la bacinica mientras usted usa el inodoro.
• Los niños suelen seguir a los padres cuando van al baño. Puede ser una oportunidad en la que estén dispuestos a usar la bacinica.
• Al comienzo, es importante enseñar a los varones a sentarse para orinar, ya que al principio es difícil controlar cuándo empezar y detenerse mientras se está de pie. Los varones intentarán estar de pie para orinar cuando vean a otros varones de pie.
• Algunos niños aprenden simulando enseñar a un muñeco a ir al baño. Busque un muñeco que tenga un agujero en la boca y en la zona del pañal y al que su hijo(a) pueda dar de comer, y “enseñen” al muñeco a bajarse la ropa interior para ir al baño. Haga que ese aprendizaje sea divertido para su hijo(a).
• Haga que ir al baño sea parte de la rutina diaria de su hijo(a), por ejemplo, lo primero que hace en la mañana, después de las comidas y de las siestas, y antes de acostarse.

Durante el periodo para enseñar a ir al baño

• Después de que su hijo(a) empiece a usar la bacinica o el inodoro y pueda avisarle que necesita ir al baño, no es necesario llevarlo(a) en intervalos regulares ni recordarle demasiadas veces que tiene que ir al baño.
• Puede ser buena idea que comience a usar ropa interior/pañales de entrenamiento. Usar ropa interior es un signo de ser más grande, y a la mayoría de los niños les gusta ser una “niña grande” o un “niño grande”. Usar pañales después de que se empezó a enseñarle a ir al baño puede ser confuso para su hijo(a).
• Si su hijo(a) tiene un accidente cuando está usando ropa interior o pañales de entrenamiento, no lo(a) castigue. Mantenga la calma y limpie sin darle mucha importancia.
• Continúe elogiando o dando recompensas a su hijo(a) en cada paso del proceso: por bajarse la ropa interior, por sentarse en la bacinica y por ir al baño. Si los padres muestran que están contentos cuando su hijo(a) orina o defeca en la bacinica o el inodoro, es más probable que use la bacinica o el inodoro la próxima vez.
• A medida que los niños crecen, pueden aprender a limpiarse solos y a lavarse las manos después de ir al baño. Hay que enseñar a las niñas a limpiarse desde adelante hacia atrás para que los gérmenes de la materia fecal no se lleven hacia la zona urinaria.
• Recuerde que cada niño es diferente y que aprenderá a ir al baño a su propio ritmo. Si el proceso para enseñarle a ir al baño no va bien, es mejor volver a ponerle pañales durante algunas semanas e intentarlo de nuevo más adelante. En general, es importante enseñar a ir al baño con calma y sin prisa.
• La mayoría de los niños logran controlar las deposiciones y la orina durante el día a los 3 o 4 años. Si su hijo(a) se ensucia o se moja durante el día después de esa edad, es importante que lo hable con el médico de su hijo(a).
• El control durante la noche generalmente se consigue mucho más tarde que el control durante el día. Es posible que su hijo(a) no logre el control total durante la noche hasta que tenga 4 o 5 años, o incluso más. Si su hijo(a) tiene 5 años o más y no puede mantener su ropa interior seca durante la noche, debe hablar sobre esto con el médico de su hijo(a).
• Incluso cuando los niños ya aprendieron a ir al baño, es posible que tengan algunos accidentes normales (cuando están entusiasmados o juegan mucho) o retrocesos debido a enfermedades o situaciones emocionales. Si ocurren accidentes o retrocesos, tenga paciencia. Algunos ejemplos de situaciones emocionales son una mudanza a una nueva casa, una enfermedad o muerte en la familia o un bebé recién nacido en la casa. De hecho, si sabe que va a ocurrir una situación emocional pronto, no empiece con el proceso de enseñarle a ir al baño. Espere un momento más tranquilo.

En la biblioteca o en la librería, puede encontrar libros y videos sobre cómo enseñar a ir al baño que puede consultar si necesita más información. Hable con el médico de su hijo(a) para obtener más información.