¿Cómo se trata una hernia diafragmática congénita?
El tratamiento de la CDH depende de varios factores, entre ellos, cómo están funcionando los pulmones del bebé y si presenta otros problemas médicos.
Algunos bebés comienzan el tratamiento antes de nacer. Otros no necesitan tratamiento hasta después de haber nacido.
Cirugía fetal de la CDH
Cincinnati Children’s Hospital ofrece un tipo especial de cirugía para bebés con CDH moderada o grave. Este procedimiento se llama oclusión traqueal endoluminal fetoscópica (FETO). Se hace en el útero (antes del nacimiento del bebé).
Durante la FETO, el cirujano fetal hace una pequeña incisión (corte) en el abdomen y el útero de la madre. Luego, introduce un tubo flexible y hueco (endoscopio) en el útero y en la tráquea del bebé. En el extremo del endoscopio, hay un globo pequeño que se infla y se deja dentro de la tráquea de cuatro a seis semanas.
Como los bebés reciben oxígeno a través de la placenta materna, el globo no interfiere en la respiración del bebé mientras está en el útero. En cambio, bloquea la salida de un líquido especial de los pulmones del bebé. Se cree que, cuando este líquido se acumula, contribuye a estimular el crecimiento pulmonar.
Durante el tratamiento extendido de la FETO, los médicos hacen controles prenatales frecuentes mediante imágenes para supervisar el desarrollo de los pulmones y el crecimiento general del bebé. Se hacen cada dos semanas a partir de la semana 28, y todas las semanas a partir de la semana 32.
Cuando el bebé alcanza entre las 32 y 34 semanas de gestación, el médico retira el globo para que los pulmones sigan desarrollándose de forma natural.
Parto especializado en casos de CDH
Cincinnati Children’s es uno de los pocos hospitales del país que ofrece un tipo especial de parto para bebés con una CDH grave.
Este enfoque se llama “tratamiento exútero intraparto con oxigenación por membrana extracorpórea” o EXIT-to-ECMO. Se trata de un parto por cesárea en el que el bebé se extrae del útero y se conecta de inmediato a una máquina de derivación cardiopulmonar llamada ECMO.
Como un sistema avanzado de soporte vital, la ECMO asume la función del corazón y los pulmones del bebé para mantenerlo con vida hasta que sus órganos se estabilicen y puedan funcionar de forma natural.
Los bebés con una CDH grave (que no se someten a la FETO) tienden a tener tasas de supervivencia de entre el 11 % y el 40 %. Un parto con el procedimiento EXIT-to-ECMO puede aumentar su probabilidad de supervivencia hasta un 65 %.
Cuidados intensivos después del nacimiento
Cuando los bebés nacen con una CDH, se les coloca un tubo de respiración enseguida para que puedan recibir apoyo respiratorio a través de un respirador (máquina de respiración) inmediatamente después del nacimiento. En los casos más graves de deficiencias pulmonares o cardiacas, los bebés pueden necesitar estar conectados a la ECMO para recibir apoyo avanzado hasta que sus pulmones se desarrollen y su respiración se estabilice.
La mayoría de los bebés con una CDH necesitan una cirugía para reparar el orificio en el diafragma. Esta cirugía puede hacerse días o semanas después del nacimiento, según el estado general de salud del bebé.
Durante el procedimiento, el cirujano coloca los órganos abdominales en la posición correcta. Luego, cierra el orificio en el diafragma de forma permanente.
Algunos bebés con una CDH grave pueden permanecer conectados a la ECMO durante varias semanas después de la cirugía. Esto le da más tiempo a los pulmones para sanar y recuperarse.
Todos los bebés que se someten a una cirugía de reparación de CDH deben permanecer en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (NICU) para recuperarse durante al menos 12 semanas.