Tabaquismo (Smoking Risks)
Cada año, el tabaquismo provoca enfermedades que matan a más de 480 000 personas en Estados Unidos. A pesar de las campañas antitabaco y los descargos de responsabilidad médica existentes, muchas personas siguen fumando o empiezan a hacerlo todos los años. Según la Sociedad Americana del Cáncer (American Cancer Society), el 90 % de los nuevos fumadores son niños y adolescentes que, en muchos casos, sustituyen a los fumadores que dejaron este hábito o murieron prematuramente a causa de una enfermedad relacionada con el tabaquismo.
Los fumadores no solo tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades pulmonares, como el cáncer de pulmón y el enfisema, sino que también tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y cáncer bucal.
Datos sobre el tabaquismo y los adolescentes
Considere las últimas estadísticas disponibles de la Asociación Americana del Pulmón (American Lung Association) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (Centers for Disease Control and Prevention, CDC).
- Cada día, casi 2500 menores de 18 años prueban su primer cigarrillo, y más de 400 de ellos se convertirán en nuevos fumadores habituales.
- En 2015, el 9.3 % de los estudiantes de secundaria declararon haber fumado cigarrillos en los últimos 30 días, un 74 % menos que el 36.4 % de 1997, cuando las tasas alcanzaron su punto máximo después de haber aumentado durante toda la primera mitad de la década de 1990.
- En 2015, el 2.3 % de los estudiantes de escuelas intermedias fumaron cigarrillos en los últimos 30 días.
- Sin embargo, las tasas de consumo general de tabaco siguen siendo elevadas. En 2015, el 25.3 % de los estudiantes de secundaria y el 7.4 % de los estudiantes de escuelas intermedias consumieron un producto del tabaco.
- Las formas de tabaco más consumidas entre los estudiantes de secundaria en 2015 fueron los cigarrillos electrónicos (16 %), los cigarrillos (9.3 %), los cigarros (8.6 %) y el narguile (7.2 %).
El tabaquismo y el sistema cardiovascular
- Provoca un aumento inmediato y a largo plazo de la presión arterial.
- Provoca un aumento inmediato y a largo plazo de la frecuencia cardíaca.
- Reduce el gasto cardíaco y el flujo sanguíneo coronario.
- Reduce la cantidad de oxígeno que llega a los tejidos del cuerpo.
- Cambia las propiedades de los vasos sanguíneos y las células sanguíneas, lo que permite que el colesterol y otras sustancias grasas se acumulen.
- Contribuye a aumentar la presión arterial y el riesgo de formación de coágulos.
- Daña los vasos sanguíneos.
- Duplica el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular isquémico (reducción del flujo sanguíneo al cerebro).
Además, el tabaquismo se asocia a la depresión y el malestar psicológico.
Riesgos del humo de segunda mano
Las estimaciones de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) indican que, cada año, aproximadamente 41 000 personas mueren a causa de las enfermedades cardíacas y vasculares que provoca el humo de segunda mano. El humo de segunda mano es el que exhalan los fumadores y el que proviene de la punta de un cigarrillo, un cigarro o una pipa encendidos.
Tanto la exposición directa como la indirecta al humo del tabaco suponen importantes riesgos para la salud de las mujeres embarazadas, los lactantes y los niños pequeños. Los niños y bebés expuestos al humo del tabaco tienen más probabilidades de sufrir infecciones de oído y asma, y corren un mayor riesgo de sufrir el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) que los niños y bebés sin la misma exposición.
Los siguientes síntomas comunes pueden estar asociados a la exposición al humo de segunda mano. Sin embargo, cada persona puede presentar los síntomas de forma diferente. Estos son algunos de los síntomas:
Los síntomas que presentan las personas debido a la exposición al humo de segunda mano pueden parecerse a los de otras afecciones y problemas médicos. Consulte siempre al médico de su hijo adolescente para obtener un diagnóstico.
El tabaquismo y las enfermedades cardiovasculares
El tabaquismo, además del colesterol elevado, la hipertensión arterial, la inactividad física, la obesidad y la diabetes, encabeza la lista de los principales factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares. Además, es responsable de la muerte de más de 430 000 estadounidenses cada año. De hecho, el tabaquismo ha sido clasificado como la causa más evitable de muerte prematura en los Estados Unidos.
Cigarrillos electrónicos
- El uso de los cigarrillos electrónicos no es seguro para los niños, los adolescentes y los adultos jóvenes.
- La mayoría de los cigarrillos electrónicos contienen nicotina. La nicotina es altamente adictiva y puede dañar el desarrollo del cerebro de los adolescentes, lo que continúa hasta principios o mediados de los 20 años.
- Los cigarrillos electrónicos pueden contener otras sustancias nocivas además de la nicotina.
- Los jóvenes que usan cigarrillos electrónicos pueden ser más propensos a fumar cigarrillos en el futuro.
- Los cigarrillos electrónicos son dispositivos electrónicos que calientan un líquido y producen un aerosol, o mezcla de pequeñas partículas en el aire.
- El uso de un cigarrillo electrónico se denomina a veces “vapeo”.
- Los dispositivos de cigarrillos electrónicos pueden utilizarse para suministrar marihuana y otras drogas.
Dejar de fumar
Según la Asociación Americana del Corazón, dejar de fumar no solo reduce el riesgo de padecer una enfermedad coronaria, sino que también disminuye en un 50 % el riesgo de repetición de ataques cardíacos y de muerte por enfermedad cardíaca. Las investigaciones también indican que dejar de fumar es crucial en el tratamiento de muchos factores que contribuyen a los ataques cardíacos, como la aterosclerosis, la trombosis, la enfermedad arterial coronaria y las arritmias cardíacas.
Dejar de fumar es una tarea tanto mental como física. Mentalmente, debe estar preparado y relativamente libre de estrés. Desde el punto de vista físico, debe comprometerse a hacer ejercicio a diario y dormir lo suficiente. Una persona que intenta dejar de fumar debe superar dos obstáculos: la adicción física a la nicotina y el hábito. La Academia Americana de Otorrinolaringología (American Academy of Otolaryngology) y la Asociación Norteamericana del Pulmón ofrecen los siguientes consejos para ayudar a los fumadores a dejar de consumir productos del tabaco:
- Piense por qué quiere dejar de fumar.
- Elija un momento libre de estrés para dejar de fumar.
- Pida apoyo y ánimo a sus familiares y amigos.
- Empiece a hacer algo de ejercicio o actividad física a diario para aliviar el estrés y mejorar su salud.
- Descanse lo suficiente.
- Lleve una dieta equilibrada.
- Únase a un programa para dejar de fumar o a otro grupo de apoyo.
En algunos casos, los fumadores se benefician de los productos de reemplazo de la nicotina para abandonar el hábito de fumar. Estos productos siguen proporcionando a los fumadores nicotina para satisfacer su deseo. Sin embargo, la ventaja de los productos de reemplazo de la nicotina es la eliminación del alquitrán y los gases tóxicos que emiten los cigarrillos. Las mujeres embarazadas o en período de lactancia y las personas con otras afecciones deben consultar con su médico sobre los productos de reemplazo de la nicotina antes de utilizarlos. Algunos ejemplos de estos productos son los siguientes:
- Chicle de nicotina: un chicle de venta libre que libera pequeñas cantidades de nicotina para ayudar a reducir los síntomas de abstinencia de la nicotina.
- Parche de nicotina: un parche de venta libre que se aplica en la parte superior del cuerpo una vez al día y que libera una dosis constante de nicotina para ayudar a reducir las ganas de fumar.
- Inhalador de nicotina o aerosol nasal: un producto de reemplazo de la nicotina de venta con receta que libera esta sustancia química para ayudar a reducir los síntomas de abstinencia (requiere la aprobación de un médico antes de usarlo).
Contacto
El programa de la Asociación Americana del Pulmón denominado Not-On-Tobacco (N-O-T) (solo disponible en inglés) está diseñado para los fumadores de 14 a 19 años que quieren dejar de fumar. Enlace a la página: N-O-T: Not On Tobacco. Programa de eficacia probada para dejar de fumar y vapear para adolescentes | Asociación Americana del Pulmón (solo disponible en inglés)
